El nuevo libro editado por
Letra Clara,
Piel adentro, nos ha dado la oportunidad de conocer a una escritora de nuevas miras, que concibe la literatura de un modo muy especial,
Rafaela Wait. Esta gaditana, que reside en la actualidad en Londres, ha tenido la amabilidad de responder a unas preguntas acerca de su obra y de su faceta como escritora.
Piel adentro es su primer libro editado. Con él, según nos comentó, quiere cerrar una etapa creativa que ha transcurrido a lo largo de una buena parte de su vida. ¿Cuál es la esencia de esta obra?Tantas cosas podrían ser este libro que intentar resumir su esencia sería como meterlo en una jaula, como intentar describir a una persona, con sus sentimientos contradictorios, con sus virtudes y defectos, con lo que gusta y con lo que no. Prefiero dejarlo ser él mismo, ya independiente de mi persona, sin intentar acotar su recorrido, sin perfilar por dónde tiene que ir. Lo he creado, y es libre de ser lo que cada lector quiera que sea.
El libro ofrece una curiosa mezcolanza de géneros: narrativa poética, poesía en sí misma, imágenes de su autoría... ¿Responde este hecho a una concepción de la creación artística sin límites?Responde a la necesidad de comunicación de lo desconocido, lo irreal, lúdico, surrealista, laberíntico... En ocasiones llego a una frontera en la que se mezclan las palabras y las imágenes, evocadas generalmente por la estimulación musical. Cuando llego a este punto observo el mundo que me rodea, irracional y colorista, y me siento totalmente a gusto en él. Es entonces cuando experimento la necesidad de comunicarlo, y para ello cualquier medio de expresión me es válido.
Quería dar una visión de las realidades o irrealidades paralelas, de las infinitas combinaciones literarias; jugar con los pensamientos como si fueran imágenes pictóricas, jugar con las palabras combinándolas como en un cuadro impresionista. Porque las palabras son como pinceladas que al mirarlas en conjunto, y dependiendo de quién las esté leyendo, serán interpretadas de una manera u otra.
Es difícil expresar lo que no existe, y de ahí la mezcla ecléctica de disciplinas y estilos en pro de la búsqueda de una idea. Porque el fin último es comunicar, e intento ubicar cada imagen donde se siente más a gusto. Antes de plasmarlas pregunto a las ideas dónde quieren estar y ellas deciden. Y es ahí donde están, justo donde han querido.
El primer texto está datado en 1983, en Cádiz; el último, en 2008, en Londres. Entre medias, Sevilla, Madrid, Sóller, Geilenkirchen, Pollença... Se deduce que el "cambio de escenario" es una constante en su vida. ¿Cómo le ha influido esta circunstancia en su escritura?Indudablemente enriqueciéndola. Partiendo del hecho que vivir enriquece, es como experimentar muchas vidas. Cada vez que llegas a un rincón del mundo aprendes diferentes modos de vida, costumbres, idiomas y, por consiguiente, maneras de pensar configuradas por un lenguaje totalmente extraño al tuyo.
La noción de tu propia vida, donde te has criado, tu cultura... se vuelve totalmente relativa. Te das cuenta de que en este mundo nadie es más listo ni más tonto, ni que hay países en los que saben hacer mejor o peor las cosas, sencillamente son formas de vida humana diferentes, conformadas por la geogría y el devenir histórico. Cada grupo humano lo hace lo mejor que puede adaptándose a su propio ambiente.
Vivir en el extranjero me ha permitido descubrir una visión distinta de mi país, tanto cultural e histórica, como políticamente, desde un relativismo cultural y una mentalidad multicultural.
A su vez el desarraigo es una constante en mi vida que indudablemente ha influido de una manera determinante en el desarrollo de mi persona y, por lo tanto, de mis escritos.
Hay un fragmento del libro que dice: "... cuando la vida deja de ser poesía para hacerse realidad." Realmente, ¿cree que es posible prescindir de la poesía y, a pesar de ello, seguir viviendo?Es difícil responder a esa pregunta sin caer en contradicciones. De qué es la poesía, de cuándo aparece o desaparece, podría decirse que depende de cada persona.
Por una parte creo que la poesía es un lujo que nos podemos permitir desde nuestro mundo acomodado. La realidad es que en nuestro planeta más de un quinto de la población apenas sobrevive (en el sentido más duro y cruel de la palabra) por culpa de las sequías, la hambruna y las guerras. En ocasiones pienso que ahí no cabe la poesía, ni la filosofía; ahí sólo cabe el ver cómo llego a mañana.
Por otro lado he estado en lugares donde el sufrimiento y la tragedia humana aún se pueden respirar, y he podido darme cuenta de que la poesía brota en las condiciones más duras. Es en la adversidad cuando aparece ese punto creativo terapéutico, ya sea a través de la poesía, la pintura, la música, la ingeniería... Es en las condiciones adversas cuando el ingenio humano se pone en movimiento para dar soluciones e innovar.
Digamos que no concibo la vida sin creatividad, más que sin poesía.
Desde luego este libro podría asimilarse a un desnudo del alma. Nos consta que durante un tiempo fue reacia a dar el paso hacia la edición, tratándose de una obra tan personal. ¿Por qué se decidió finalmente a seguir adelante?Más que el desnudo de mi alma es el desnudo de muchas almas. Quizás por mi condición de psicóloga muchas almas se han volcado en mí. He escuchado, empatizado y vivido como propio lo ajeno. No todo lo narrado en mi libro son experiencias propias; muchas son indirectas, porque el sentimiento de los otros ha estado en mí, y una vez hecho propio así los he volcado.
He decidido sacarlos fuera cuando he aprendido lo suficiente de ellos y cuando han sido sustituidos por otros, unos más elaborados, otros más simplificados. He querido esperarme para no publicar prematuramente, para seleccionar mis escritor, aumentar mi fe en mí y vencer la desconfianza.
"Porque tengo que desprenderme de lo que me sobra para que quepa lo que aún no tengo. Mi armario está repleto, y es hora de trasladar cosas al desván" es una frase de la introducción de
Piel adentro que creo que podría explicarlo.
Dicen que en el momento en que se publica un libro su contenido deja de pertenecer al autor. ¿Cómo le gustaría que el lector hiciera suyo Piel adentro?Como algo propio, disfrutando de lo imaginativo, de lo azul, de lo ajeno, porque después de todo la literatura no deja de ser un sano ejercicio de enajenación.
No quiero dictar cómo se ha de leer este libro. No es como una novela, donde absolutamente todo está escrito, concretado, encorsetado. El poeta insinúa y despierta tu ser, te lanza entre las palabras y te deja hacer. Así es como me gustaría que se afrontara la lectura de mi libro, con toda libertad, que, como indica el título, "es en la piel para adentro la íntima e ineludible realidad".
Como comentaba, su experiencia profesional está ligada al ámbito de la Psicología. ¿Influye este hecho en su modo de entender la literatura?Sí. Mis primeros ensayos comenzaron siendo una simulación de cómo podría ser el pensamiento y el mundo desde la perspectiva de las diferentes patologías, neurosis, fobias, obsesiones, esquizofrenias... Con ello descubrí lo que me gusta bucear en el mundo de lo insólito. Pude darme cuenta de que quizás una psicopatología no es más que una concepción diferente y particular de la realidad que desubica del mundo a quien la padece por ser cualitativamente diferente a los demás, mas, aun así, totalmente válida.
Pienso que la literatura no sólo sirve de terapia individual; además es un medio de difusión de conocimientos e ideas que pueden despertar en otras personas nuevos resultados y estilos.
Suponemos que éste sólo es el inicio de su aventura literaria. ¿Qué camino tomará a partir de ahora? ¿En qué está trabajando en estos momentos?He intentado otros caminos, pero el estilo en el que más a gusto me siento es en el del ensayo poético y en el mundo de lo irreal. Actutalmente trabajo en un proyecto que en un principio iba a ser de corte más técnico, por tener de base la psicología cognitiva y la terapia racional-emotiva, pero no me siento satisfecha con un estilo de corte racional, así que intento unir ambos géneros. No me está resultado fácil la comunión de una disciplina científica con una disciplina artística, pero habré de buscar en lo nuevo, en lo que aún no existe, y a ver qué sale, aún a riesgo de equivocarme.
Como autora y como lectora, ¿qué espera de la literatura?Que sepa reaccionar a tiempo, dejando de dar la espalda a los "géneros en peligro de extinción", la poesía y el ensayo.
Como autora, espero que me lleve algún día al lugar que busco dentro de una lámina de papel en blanco.
Como lectora, que me estimule y enriquezca con lo nuevo. Me aburre la literatura que me cuenta una historia y, cuando termino el libro, no deja nada en mí, sólo la crónica de un trozo de vida anónima, o un deformado capítulo de la historia.
¿Qué diría a aquellos que se están iniciando como escritores?Que exploren, que suelten amarras y se adentren en el arte de la literatura, en la imaginación, en el laberinto de las palabras y que se pierdan en ellas. El mundo de las palabras es mágico, aún combinándolas de manera aparentemente inconexas siempre se les puede dotar de significado. Que invetiguen y se atrevan a romper y a innovar, que el mundo evoluciona a base de ensayos y errores, que de lo que ya está descubierto tiene que salir lo nuevo, porque si se siguen los cánones no hay innovación. Hay mucho de lo mismo, historias y aventuras. Quiero leer lo que no existe.
Rafaela Wait (
http://rafaelawait.myartsonline.com/) es licenciada en Psicología y posee un master en Terapia de la conducta. Ha trabajado en el área de la animación sociocultural, prevención contra la drogodependencia y psicología clínica infantil. Cursó los estudios de música y piano en el conservatorio Manuel de Falla (Cádiz).